viernes, 4 de octubre de 2013

Días de Fiesta I

Inaguantables. No encuentro otra palabra que mejor defina el estado de mis niños la víspera de la fiesta del pueblo: San Miguel, patrón de la localidad, que se celebra el día 29 de Septiembre.

Este año estaban especialmente disgustados por dos motivos: por una parte, se quejaban de que "no vienen los coches chocones", y por otra, decían que "los juegos de los niños coincidían con una mañana de cole". 


















Comprobando el programa de Ferias y Fiestas pudimos ver que estaban en lo cierto.





Poco podíamos hacer respecto a su primera "gran" preocupación (además de intentar explicarles que, si no les sale rentable, es lógico que decidan ir a otra localidad). En lo que se refiere a la segunda, solucionarla... dependía de ellos.

Y como finalmente pudimos decir que "cumplieron" con su tarea, a partir de las 12 de la mañana, y acompañados por Pepi, su profe de inglés, fuimos con ellos a la "carpa" (situada junto al colegio) para ver qué les tenían preparado.



Y así, nerviosos, expectantes y con algún que otro "pique" entre ellos... ¡empezó la competición!.

CARRERA DE SACOS.
Dylan y Sara no quisieron participar. Creo que se notaban demasiado inseguros al tener que desplazarse así. No obstante, no pararon de animar a sus compañeros... ¡Carla es toda una campeona!.



Preparados, listos... Nacho, deja de posar... que no te enteras.
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¡Ánimo, Naiara!... qué bien lo hace la pequeñita.


Y aquí los súper campeones del juego... eso sí... no os lo han puesto fácil ¿verdad?

RODAMOS LA NARANJA.
El segundo juego consistía en hacer rodar una naranja con un plátano atado a la cintura de cada niño. Los movimientos que realizaban... todo un espectáculo.





Y aquí, los ganadores del juego. Carla, Nacho... ¡sois unos fenómenos!



JUEGO DE LAS SILLAS. 
Uff!... mira que me ha gustado a mí siempre este juego... aunque aquí los "piques" entre ellos se multiplican. En esta ocasión la sangre no llegó al río y todos lo pasaron muy bien.





Y los ganadores, posando de nuevo. Nacho, Carla... ¡dejar algo para los demás!



                                                    












NO SIN MI HUEVO
Sujetando con la boca una cuchara en la que habían depositado un huevo (crudo, para sorpresa de Paula), debían realizar un recorrido evitando, claro, que se cayera.

Trabajito les costó, pero lo consiguieron.





APUNTA BIEN
Este juego de habilidad consistía en introducir un boli en una botella, con muchas dificultades, claro. El cuello de la botella era bastante estrecho y el boli estaba sujeto a la parte posterior de su cintura con una cuerda. ¡Madre mía!... imposible no reírse con los movimientos de algunos... todos, eso sí mostraron mucha destreza en la tarea, sobre todo Paulita, que hizo realidad eso de que "más vale maña que fuerza".



















Con los súper campeones... Paula, Paulita y Nacho... que no para. ¡Enhorabuena, chicos!. Sois los mejores.



ABRAZOS DE AMIGOS.
Agrupándose de dos en dos y atados por los pies con una cuerda (que trajo no pocos problemas porque se rompía continuamente), debían ir hasta un punto marcado y volver a la salida. Entre protestas decidieron declarar nula prueba, aunque, al final... lo importante fue el buen rato que pasamos todos juntos.





Y así terminó la jornada, cansados pero contentos. Todos (independientemente de los puntos conseguidos en los juegos anteriores), obtuvieron su regalo y su correspondiente felicitación por lo bien que lo habían hecho. Pocas veces los había visto tan felices, sabiendo que por delante tenían... ¡4 días de fiesta!. Pasarlo muy bien, chicos... ya nos contaréis toooodo lo que habéis hecho.



2 comentarios:

  1. Ay pobres!!!! Sí, un pequeño despiste y ajustes de última hora nos llevó al error de colocar los juegos el viernes en horario escolar!!! Juegos infantiles.... sin niños, ohhhhh! tuvimos que pedir la amable colaboración de Cristina y Pepi y robarles dos horitas de cole más las descentradas horas previas. Gracias por permitirles salir a la cita. :)

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  2. De nada!. Lo hicimos encantadas... y lo agradecimos también, porque ese día... ¡imposible trabajar con ellos!. La fiesta se respiraba en el ambiente... y ello, claro, querían formar parte de ella.

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